Lo sabemos. Navidades, fin de año, reyes… Los excesos de estas fechas son imposibles, casi tanto como las dietas milagrosas o las soluciones express. Perder peso no tiene que ser un sacrificio inhumano, ¡lee y verás!
Ahora que la fiesta ha terminado, es hora de reconciliarse con la báscula y poner orden en la dieta. Pero a la hora de perder peso no todo vale. Descubre algunas de las dietas que, aunque hayan ganado popularidad, no te ayudarán en tu propósito de perder peso.
Ayuno intermitente
Que no cunda el pánico. Que no ayude a perder peso no significa que sea nocivo para nuestra salud. El ayuno intermitente, según un estudio de la Universidad Adelaida, en Australia, ayuda a reducir los niveles de insulina y también el colesterol, por lo que disminuye el riesgo de desarrollar diabetes o enfermedades cardiovasculares.
Restricción calórica
Está comprobada la efectividad de la restricción calórica para perder peso, pero ésta es solo beneficiosa para la salud (y para perder esos kilos de más) si se hace bajo supervisión médica, tal y como ha revelado un estudio publicado en la revista Lancet Diabetes&Endocrinology. La investigación concluye que una reducción de 300 calorías al día mejora los marcadores metabólicos y cardiovasculares, así como a perder peso y grasa corporal. Pero no todo el mundo consigue aguantar raciones tan pequeñas, y si pasamos hambre durante una temporada aparece el gran enemigo: el efecto rebote.
No ponerse metas muy ambiciosas a corto plazo y una dieta equilibrada, así como añadir algún complemento alimenticio específico para el control de peso, son nuestra mejor recomendación para, esta vez sí, lograr tu objetivo
Referencias y datos extraídos de la revista BuenaVida de El País.