Aceite de árbol del té: para qué sirve y cómo utilizarlo

El aceite de árbol del té puede hacer mucho por ti y por tu casa.

Los orígenes del aceite del árbol del té

Para conocer su origen debemos remontarnos a la época de los aborígenes de Australia, quienes usaban las hojas del árbol del té, desde hace miles de años, para usos cutáneos. En el siglo XVIII, el capitán Cook, junto con colonos británicos, conocieron las propiedades y beneficios del árbol del té durante una expedición en Australia. Ellos se encargaron de traer este aceite a Europa, donde se investigó para su posterior uso en medicina.

¿Cuáles son sus propiedades y cómo usarlo?

Este aceite se obtiene al destilar con vapor las hojas del árbol y tiene un aroma a resina o alcanfor que nos recuerda a un olor desinfectante. Aquí te dejamos algunos tips para incorporarlo a tus rutinas:

  1. Baños calientes: vierte tres gotas en la bañera con agua caliente y relájate. El vapor del agua junto con este aceite te ayudará con tu piel. En caso de que no dispongas de bañera, puedes utilizar un cuenco de agua caliente y colocarte una toalla sobre la cabeza mientras pones el rostro sobre el cuenco para aprovechar los beneficios del vapor.
  2. Colutorios y gargarismos: ¿mal aliento? Se recomienda ingerir de dos a tres gotas diluidas en un vaso de agua o zumo y acompañándolo con alimentos, también se pueden realizar inhalaciones o ingerir para temas relacionados con la garganta.
  3. Pies relajados y descansados: llena un recipiente con agua tibia y añádele un par de gotas de aceite de árbol del té. Ponte cómodo, introduce los pies en el recipiente y relájate.
  4. Limpieza de utensilios de maquillaje: añade unas gotas de aceite a tu limpiador habitual de brochas y pinceles. Te ayudará a mantenerlos limpios y suaves.
  5. Cuidado del cuero cabelludo: también puedes utilizar este aceite para agregar unas gotas a tu champú, muy útil para el cuero cabelludo.
  6. Refresca el ambiente: si tienes un difusor de aroma, añadir unas gotas de aceite de árbol del té en él refrescará y limpiará el ambiente. En caso de no tenerlo o querer disponer de este recurso en cualquier situación, puedes verter unas gotas en un pañuelo y respirar su aroma. Es muy útil, por ejemplo, para vuelos largos.

¡Importante!

A pesar de que no se conocen contraindicaciones para el aceite de árbol del té de Plameca, no se recomienda su uso durante el embarazo y la lactancia. No contiene colorantes, perfumes, parabenos ni siliconas, pero es muy importante no superar la dosis recomendada y mantenerlo alejado del alcance de los niños.

Plameca utiliza aceite 100% de origen australiano, y garantiza dicho origen mediante el análisis quiral de los componentes terpénicos que permite diferenciar el origen botánico y geográfico del aceite, además de cuantificar su pureza. El aceite de árbol del té de Plameca garantiza una riqueza de 40% de terpinen-4-ol y de 80% de terpenos totales, muy por encima de las cantidades mínimas exigidas por los estándares internacionales (min. 30%).

Antes de utilizar el aceite esencial de árbol de té es imprescindible leer bien las instrucciones del fabricante y, en ningún caso, sobrepasar la dosis recomendada.