Tómate un zumo de naranja, que va cargado de vitamina C, y ¡rápido, que sino se le van las vitaminas!, es uno de los muchos mitos que giran alrededor de esta vitamina tan necesaria para, entre otras cosas, un buen funcionamiento de nuestro sistema inmune y respiratorio.
¿Qué es la vitamina C y para qué sirve?
Tal y como recoge el National Institute of Health, la vitamina C, conocida como ácido ascórbico, es un nutriente hidrosoluble que se encuentra en ciertos alimentos. En el cuerpo, actúa como antioxidante, al ayudar a proteger las células contra los daños causados por los radicales libres. Los radicales libres son compuestos que se forman cuando el cuerpo convierte los alimentos que consumimos en energía. Las personas también están expuestas a los radicales libres presentes en el ambiente por el humo del cigarrillo, la contaminación del aire y la radiación solar ultravioleta.
Además, el cuerpo necesita vitamina C para producir colágeno, una proteína necesaria para la cicatrización de las heridas. Esta vitamina también mejora la absorción del hierro presente en los alimentos de origen vegetal y contribuye al buen funcionamiento del sistema inmunitario para proteger al cuerpo contra las enfermedades.
¿Todos necesitamos la misma cantidad?
La respuesta es rotundamente no. A continuación, os mostramos una tabla con las cantidades diarias aproximadas a consumir dependiendo de la edad, aunque hay otros factores a tener en cuenta. Por ejemplo, si eres fumador, deberás sumar 35 mg de vitamina C a los que ya aparecen en la tabla según tu franja de edad (datos extraídos del National Institutes of Health).
Edad – Cantidad diaria de vitamina C recomendada:
Bebés hasta los 6 meses de edad – 40 mg
Bebés de 7 a 12 meses de edad – 50 mg
Niños de 1 a 3 años de edad – 15 mg
Niños de 4 a 8 años de edad – 25 mg
Niños de 9 a 13 años de edad – 45 mg
Adolescentes (varones) de 14 a 18 años de edad – 75 mg
Adolescentes (niñas) de 14 a 18 años de edad – 65 mg
Adultos (hombres) – 90 mg
Adultos (mujeres – 75 mg
Adolescentes embarazadas – 80 mg
Mujeres embarazadas – 85 mg
Adolescentes en período de lactancia – 115 mg
Mujeres en período de lactancia – 120 mg
Los alimentos con más vitamina C
Te lo adelantamos: no son ni las naranjas ni los limones los que ocupan las primeras posiciones del pódium de alimentos con más vitamina C. Pero… ¿cuáles son? Aquí tienes un listado con algunos alimentos y su concentración de vitamina C por cada 100 mg del alimento ingerido.
- Grosella negra: 189 mg.
- Guayaba: 180 mg.
- Perejil: 166 mg.
- Pimiento rojo: 140 mg.
- Kale: 120 mg.
- Coles de Bruselas: 112 mg.
- Brócoli: 110 mg.
- Kiwi: 100 mg.
- Bulbo de hinojo: 93 mg.
- Fresas: 86 mg.
- Papaya: 70 mg.
- Naranja: 50 mg.
Complementos alimenticios con vitamina C
Los complementos alimenticios no deben utilizarse nunca como sustitutos de una dieta variada, equilibrada y un modo de vida sano, pero puedes aumentar la ingesta de vitamina C gracias a complementos alimenticios como los que te presentamos a continuación, que además de vitamina C, contienen otros ingredientes para un bienestar natural:
- Protectium pectoral adultos: 60 mg.
- Summum propol adultos: 60 mg.
- Summum propol infantil: 90 mg.
- Vittal in adultos: 60 mg.
- Vittal in infantil: 60 mg.
- Curarti complex: 60 mg.
- Curarti selectium: 60 mg.